07 de Noviembre, 2008
□
El infeliz que soy parte 1 |
Una sensación… |
Cerré los ojos, quise dormir, parece que nunca llegaría el momento de conciliar el sueño. Me duele el alma. Siento dentro de mí una angustia inagotable. Yacía en mi lecho cuando una mano cegó mi llanto. La mano protectora, la esperanza. La que siempre aparece en los peores momentos. Poco duró. En minutos desapareció y le dio paso a otra sensación: el amor. Recordé momentos, caricias, besos y noches de pasión. Me pregunte ¿Cuánto dura el amor?, y ¿qué es el amor? Será una triste sensación de felicidad o una feliz sensación de tristeza. No lo se. Llegue a la conclusión de que es solo una sensación, que solo se da cuando dos personas piensan lo mismo, sienten lo mismo. Aunque sean muy distintas. Eso mismo que une a dos personas, es lo que las separa y vuelve a aparecer la soledad. La dueña de mi vida, la que se apodera de los malditos momentos en que el amor se olvida el camino para llegar a mí. |
|
publicado por
jonhyh a las 14:24 · 1 Comentario
· Recomendar |
|
Comentarios (1) ·
Enviar comentario |
|
El "amor" no sólo una sensación, sino un sentimiento que siempre está presente, como la soledad y toda la sátira de problemas que nos formulamos para oscurecer la realidad, el presente; y confundirlo y mal lograr así recuerdos. Porque es más fácil problematizar que darnos cuenta que somos hijos reconocidos de la adversidad y desconocidos en nuestro propio actuar. Confundidos porque nos impusieron una forma de sentir, paranoicos porque no podemos despojarnos de principios ajenos y únicos y reconocibles cuando recuperemos el verdadero sentimieto de poder pensar por nosotros mismos, porque pocas veces actuamos con nuestras pasiones. Será lo que tenga que ser amigo, o no será nada, o será lo que uno quiera que sea, eso es sentimiento y sobre esta base la diplomática felicidad, los paradigmas del amor, siempre presentes mientras estemos consientes de que sufrimos porque somos hijos de... y no propietarios de nuestras elecciones. Esta bueno padecer la tristeza, el amor, la felicidad redundante, lo que es miserable es no reconocerla como parte de nuestros aciertos y fracasos, hacemos y deshacemos cuerpos para terminar de saciar nuestros deseos, que en el mejor de los casos terminan envolviendonos en un mar de lagrimas. Vaciar lo vivido, solo con el motivo de saborear la nostalgia, no por lamentarnos de lo que hicimos. Jamás debemos arrepentirnos de ser sensibles y recordar en cada momento la palabra amor como el dibujo más perfecto de llegar al otro, aunque sea eso solo un momento transitorio de nuestras vidas. Nadie se nos parece, ni nostros nos parecemos a nosostros mismos, sino aquellos que nos impusieron esa maldita forma de pensar en la que la felicidad es cuestión de suerte, hipocresía que la pasión no resiste viviendo en cuerpos tan sensibles. El sueño viene, se queda o se va por una decisión que nos es ajena y que no podemos materializar, no hay causa más sútil que poder vivir la experiencia de la libertad. Saludos
|
|
SOBRE MÍ |
Jonathan E. Heredia
Bienvenidos a Volando Bajito, mi nombre es Jonathan Heredia. Los invito a subirse al carrusel de la imaginacion, a dejarse llevar por la ficción que hoy se mezcla con la absurda realidad...
»
Ver perfil
|
|
|
|